“Entonces Pedro
respondió: —Veo con claridad que Dios no muestra favoritismo. En cada nación,
él acepta a los que lo temen y hacen lo correcto”.
Hechos 10:34-35
Cuando leemos esta
frase: “Dios no tiene favoritos”, cuantas verdades corren por nuestra
mente, recuerdos, historias, anécdotas; pero hay una sola realidad detrás de
esta frase, para Dios todos somos iguales. Muchas veces nos autoexcluimos de
los planes y proyectos de Dios porque pensamos que no tenemos las capacidades o
condiciones para llevarlas a cabo.
Pero ten presente
siempre: ¡Nunca te compares con nadie, nunca te sientas menos que otros, nosotros
somos originales, tenemos cualidades diferentes o quizá parecidas a otros, pero
aun así seguimos siendo únicos!. Dios nos ama así como somos, morochos,
petizos, no importa la raza, color, u origen, para Dios no hay favoritos, todos
somos iguales ante él.
Todo esto no me puede llevar más que a pensar que DIOS NO TIENE FAVORITOS, que El puede usar tu vida si tan solo te sometes a su voluntad y le dices: “Dios mío, haz lo que quieras conmigo”.
No te acuses por
los defectos que puedas tener, porque Dios no ve tus defectos como una barrera
para usarte, al contrario Dios ve tus defectos como una manera de poder
demostrarte que El puede transformar lo defectuoso en algo útil, productivo, eficaz.
Sabías que eres especial,
Sabías que tienes un lugar allá en el cielo
No Hay nadie como tú tan especial,
Con tus defectos y cualidades,
Cómo tú no hay.
Y como Dios no
tiene favoritos, entonces debes saber que:
¡Tu estas en la
lista de Dios, Él te usará de acuerdo a su gracia y voluntad!
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